Como hemos visto anteriormente, el útero primitivo de las profundidades (Tahamatu/Tiamat) ha dado a luz al cielo y a la tierra. Pero el cielo y la tierra aún no están en su lugar dentro del universo. Ahí es donde entran los dioses más jóvenes. El cielo se refiere al cielo, que El coloca arriba; y la tierra se refiere a la tierra seca, que El coloca debajo. Esto representa la creación del firmamento, que frena el caos primitivo y permite que aparezca la tierra seca.
De esto vemos que todas las cosas emergieron de las aguas, de las profundidades. El firmamento establece la ley y el orden. Se frena el caos más allá. Hasta ahora estamos viendo algunas similitudes con el mito de Babilonia, con el cielo y la tierra emergiendo de las profundidades. En el misticismo babilónico, vemos cuatro elementos en el universo: cielo, viento, tierra y mar. En este mito cananeo, vemos los mares y el viento (que habita el primer cielo) que viene primero, y luego el cielo (el tercer y más alto cielo donde habita el), y la tierra emerge de debajo del mar. Entonces el universo ahora está ordenado por El y los elementos se ordenan, yendo (de menor a mayor: mar, tierra, viento, cielo). Curiosamente, el fuego aún no es un elemento importante, ya que se menciona de pasada como un descubrimiento de Ur, Ec y Lehobah, que eran deidades primarias.
Sin embargo, cómo exactamente El crea el universo no se menciona en detalle, si nos alejamos de Berot y hacia Ebla, encontramos allí un mito de la creación que menciona a Dabar (Word). Dabar es la palabra divina, que se habla y las cosas suceden. Las palabras tienen poder mágico, y también vemos esto en el mito egipcio. El tal vez habla, y sus palabras se cumplen por medio de sus hijos (los dioses) o sus sirvientes (los ángeles de humo, fuego y luz). El poder de las palabras de El se menciona en la Epopeya de Baal: "Tu decreto, El, es sabio; tu sabiduría es eterna". Pero esto es de otro mito de la creación de una ciudad diferente, por lo que volveré una vez más a Sakkun-yaton.
La compleja narrativa que describe el origen del cosmos y la creación de Dios ahora pasa a algo completamente diferente. Vamos a la idea de la familia divina, y cómo El desea atacar a su padre con la ayuda de otro dios (Taat o Nebo). Esta es la idea de diferentes generaciones de dioses, de herencia y cómo un hijo puede derrocar a su padre. Hasta ahora, varios dioses han nacido para El y Asherah, y también tienen una mano en la configuración del universo. Y ellos también tienen hijos, y así sucesivamente.
"Y luego nacieron hijos de los dioses, Astart y Anat; y, por consejo de Anat y Nebo, El hizo una cimitarra y una lanza de hierro. Luego Nebo se dirigió a los aliados de El con palabras mágicas, y forjó en ellos un deseo entusiasta de hacer la guerra contra Shamuma en nombre de Artzu. Y El habiendo vencido a Shamuma en la batalla, lo expulsó de su reino y lo sucedió en el poder imperial. En la batalla fue tomada una querida concubina de Shamuma que estaba embarazada "y El la otorgó en matrimonio a Dagón, y, mientras estaba con él, le entregaron el hijo que había concebido por Shamuma y lo llamó Hadad".
Anat y Nebo instan a El a atacar a su padre. Shamuma es derrocado, representando a la generación más joven de dioses derrocando a la generación anterior más antigua. Es a esta generación más joven a la que más adoramos, ya que son nuestros creadores y tienen el papel más activo en el cosmos. Se pueden ver paralelos en el mito babilónico. Ahora escuchamos que Shamuma tenía una concubina que estaba embarazada, y El la casó con Dagon, donde dio a luz a Baal. Este es probablemente un intento de Sakkun-yaton para armonizar dos relatos del nacimiento de Baal: uno en el que su padre es Shamuma y otro en el que es Dagon.
Luego, el texto continúa describiendo el nacimiento de varios dioses, que enseñan cosas diferentes a los humanos. Son los dioses quienes crearon la civilización y enseñaron sus artes a los mortales. Tanto arriba como abajo. El orden ahora ha triunfado sobre el caos, y El se retira de la creación y se lo entrega a las deidades más jóvenes, Baal y Astart. Pero El todavía es mucho señor, y sus hijos no lo derrocan. Nebo lo confirma como señor del cosmos. Oímos hablar de varias montañas sagradas, como Zapan, Lubnaan, Hermon y Martu.
Dios El , padre de todos los dioses , creador del universo , dios supremo ,mejor conocido como el bondadoso , o el misericordioso. Adorado y querido en muchos pueblos semíticos bajo diferentes nombres. Se cree que los israelitas lo apartaron de los demás dioses creando una especie de henoteísmo , luego así surgiría el monoteísmo con el tiempo.
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